Aprendí a quererme antes.

Caminé durante años por grandes valles llenos de soledad, en dónde la angustia me llenaba de preocupación pues no sabía a donde ir ni que rumbo tomar, honestamente nadie te enseña a vivir, esto es algo que debes aprender por ti mismo y si, es dificil pues ciertamente hay veces en que necesitas ayuda o de una mano y es muy difícil poder encontrarla. Grandes tempestades marcaron mi vida, desde la muerte de uno de mis seres más queridos hasta la pérdida de la razón después de una borrachera, para serte honesto nunca supe con exactitud como vivir mi vida, pero de algo si estaba seguro, quería compartirla con alguien especial, quería que mi mundo no fuese únicamente mio sino un universo en dónde pudiese disfrutar todavía alguien más a parte de mi.

Pase durante mucho tiempo buscando por todos lados, ansiando encontrar a alguien, alguien que me ayudará a encontrar esa paz interior y poder decir; eres tú, el ángel que llegó a mi vida para no soltarme pero no, no fue así pues fuiste parte de las lecciones de vida en dónde te equivocas creyendo que todo lo que brilla es oro. Creí en varias ocasiones haber encontrado angeles, pequeños rastros de luz veía a su alrdedor, huellas de esperanza para no sentirme como siempre, hundido en soledad, para serte sincero nunca me había sentido tan apachurrado, tenía de verdad ese pequeño trago amargo en donde tu yo interior te dice; necesitas querer. ¡Pero nadie nos enseño a querer, nunca nos dijeron a quien y mucho menos como empezar! Pero, ¿cómo le explico eso a mi interior?, fueron años en dónde me preguntaba cómo debía sentirme al querer a alguien,  llegaron a mi vida muchas personas, amigos, familia, conocidos y falsos amores, todos ofreciendo migas de un sentimiento abstracto llamado amor. ¡No lo acepté! ¿Sabes por qué?, porqué yo sabía que merecía algo mejor, necesitaba algo más y no era el cariño sobrante de una persona vacía. ¡Diablos!, entré en grandes dilemas,  ¿a dónde ir?, ¿con quién? ¿por qué y para qué?, eran más de diez preguntas que tenía en mi interior. ¿cómo entregar tanto?, después de una larga charla conmigo mismo lo entendí.

Debía aclarar mis pensamientos, debía liberarme de estrés, debía volver a poner los pies sobre el suelo y comenzar a reflexionar. ¿Cómo entregar amor si aún no se lo que es? ¿Cómo amar a alguien si no se el significado real de lo que es amar?, tan sencillo fue entenderlo. ¡Debía admitirlo!, a pesar de haber esperado tanto para encontrar a esa persona mágica con la cual compartir mi vida no estaba listo.

Entendí entonces que el amor es un sentimieto complejo, en dónde si quieres replicarlo y compartirlo primero entenderlo. Que para amar debes en primer término amarte a ti mismo, para querer a una persona debes aprender a quererte a ti mismo, tal como eres, con defectos, con virtudes. Buenos y malos humores, debes querer tu cuerpo y también a tu mente. Partiendo de esa premisa en donde primero eres tú  y después todo lo demás entendí que no estaba listo, primero debía enamorarme de mi para poder regalar amor.

Ahora bien, si tú andas en busca de tu amor ideal, de tu principe azul o tu princesa soñada, tu hombre sadomasoquista o tu mujer intelectual debes entender lo mismo, amate a ti mismo, quierete con las mismas ganas de siempre, ofrecete el amor que quieres compartir para que seas tú mismo quien decida si es suficiente como para compartirlo.

Recuerda; en esta vida el amar implica entregarte, entregar tus días, tus noches, tus ojos, tu cuerpo y tu inteligencia. Que para querer debes aprender a quererte a ti y que tú eres la persona mas importante en tu vida.